UVic, en 2015 inició la colaboración con Osonament, que es un centro de salud mental de Osona encargado de realizar un seguimiento de las personas con trastornos mentales graves pero que se encuentran estables, es decir, con enfermedad crónica. Se empezó por evitar la inactividad física debida a la enfermedad. Una tarea que tres años más tarde se integró como un nuevo servicio de la entidad y en la que la graduada en CAFiE finalmente se ha incorporado a la plantilla, lo que supone un nuevo filón laboral. La realidad es que “cuando nos prueban, ya no nos sueltan”, recuerda Anna Puig.
En la actualidad la UVic y el COPLEFC colaboran para poner al alcance un programa de actividad física para personas que ingresan en las unidades mentales de los hospitales, concretamente en el Hospital General de Vic. Hay que tener en cuenta que dichas unidades son unidades cerradas, donde ingresan pacientes con brotes agudos que conllevan estancias de dos, tres o cuatro semanas.
En concreto, se integran píldoras de 30 a 45 minutos de actividad física impartida por un/a EFE, a quien le está permitida la entrada y trabaja en grupos reducidos, de 3-4 personas. Un programa absolutamente adaptado, puesto que la función en este contexto es, además de permitir el sentimiento de estar activo físicamente, también la de distraer la mente de los pensamientos negativos.
Todo ello reafirma la significación de la actividad física en la mejora también de la salud emocional, un componente cada vez con mayor peso.
+info: Osonament y Anna Puig Ribera (col. 8989), coordinadora UVic GREAF
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